34/2016 Primeros registros del trazado de la pardela mexicana

Ensenada, Baja California, México, 3 de junio de 2016. Utilizando tecnología de primer nivel, investigadores del CICESE Unidad La Paz (CICESE-ULP), llevaron a cabo los primeros registros del desplazamiento de la pardela mexicana (Puffinus opisthomelas) en Isla Natividad.

La pardela mexicana es un ave clasificada en peligro de extinción por la Norma Oficial Mexicana 059 (NOM 059) y casi amenazada por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN por sus siglas en inglés). Esto se debe a que aproximadamente 95 por ciento de la población se concentra en Isla Natividad; el resto se distribuye entre el archipiélago San Benito e Isla Guadalupe, así como algunos registros esporádicos en el Golfo de California.

“Esta especie es considerada en peligro de extinción no porque hay pocas, sino porque la mayor parte de la población se concentra en un mismo lugar. Supongamos que hay un evento catastrófico en Isla Natividad, esto pondría a la especie en fuerte riesgo de extinción porque no hay otras colonias grandes que puedan amortiguar el efecto de la catástrofe que pudiera ocurrir en Natividad”, señaló la Dra. Cecilia Soldatini, investigadora del CICESE-ULP y coordinadora del monitoreo de la pardela mexicana en Isla Natividad.

¿Por qué es importante conocer el trazado de la pardela mexicana?

“La pardela mexicana es un depredador tope en la cadena trófica marina y es una especie que contribuye a la salud de los niveles medianos y superiores de la cadena marina, pero sobre todo concentra los nutrientes y esa es una de las principales acciones de las aves marinas”.

Cuando las aves marinas concentran los nutrientes, fertilizan la zona, es decir, la hacen más productiva. La Isla Natividad es conocida por la producción de langosta, abulón y caracol. Esto, señala la investigadora, es muy probable que se deba a la presencia del ave.

“Si la pardela mexicana dejara de estar ahí por alguna razón, posiblemente se afectaría la productividad de la zona y, en consecuencia, la actividad comercial de pesquería”.

A pesar de los beneficios que brinda a la zona, Puffinus opisthomelas es una especie poco estudiada y los habitantes de la isla no tienen mucho conocimiento del ave. La información que se tiene no está actualizada, ya que los últimos estudios datan de finales de la década de los noventa y desde entonces no ha sido ni estudiada ni monitoreada. La intención del equipo de la Dra. Soldatini es mostrar los detalles de su ecología, comportamiento y su papel en el ecosistema, para con ello concientizar a la gente que tiene relación con el ave.

Tecnología de primer nivel

Para estimar el conteo de la población de la pardela mexicana en Isla Natividad se debía caminar por la colonia, y esto generaba disturbios en la población ya que los nidos de la especie son madrigueras subterráneas. Para evitar alteraciones, la Dra. Soladatini y su equipo utilizaron drones que les permitieron hacer fotografías y tener un modelo digital de la isla. Con la debida calibración, se realizó el conteo de la colonia estimando así la ocupación de los nidos.

El estudio de la dimensión espacial de las poblaciones y sus movimientos se realiza a través de sistemas de geolocalización (GLS) y posicionamiento global (GPS). Lo novedoso del estudio de la Dra. Soldatini recae en que la pardela mexicana nunca había sido trazada con GPS, esto se debe a que es poco estudiada, y porque es difícil utilizar instrumentación en un ave que pesa alrededor de 400 gramos y que además bucea.

Las herramientas para el monitoreo del ave no ha sido utilizada ni en México ni en otro país; es la primera vez que se utiliza instrumentación de este tipo. Los GPS fueron desarrollados específicamente para la pardela mexicana por la empresa Technosmart Europe, colaboración que surge a través del Dr. Giacomo Dell’Omo, de la organización italiana Ornis itálica.

“Los instrumentos además de grabar la posición miden velocidad, profundidad y temperatura. Su particularidad es el de tener tantos sensores miniaturizados, en dimensiones tan pequeñas que cada equipo pesa 9 gramos, ya que es recomendado por varios estudios que no pese más de 5 por ciento del peso del animal; en este caso estamos entre el 2 y 3 por ciento. Esta tecnología de vanguardia nos permite enfrentar un reto tecnológico y científico: utilizar GPS en aves marinas de tamaño pequeño”.

Actualmente se tienen seis GPS en mar. Se ha registrado que las pardelas se mueven al norte hacia Isla de Cedros y hacia el sur llegando a laguna San Ignacio; de igual manera se registraron velocidades y buceos para alimentarse. En estos momentos la información se encuentra en una fase de análisis.

La Dra. Soldatini muestra entusiasmo por los primero resultados, ya que como se mencionó, es la primera vez que se logra registrar los desplazamientos de la especie. El proyecto de monitoreo a largo plazo de la pardela mexicana en Isla Natividad se desarrolla en colaboración con la organización italiana Ornis Italica. Por parte del CICESE-ULP participan la propia Dra. Cecilia Soldatini, el Dr. Yuri Albores, el Mtro. Alejandro Ramos así como una estudiante de posgrado. De igual manera se han vinculado con la sociedad cooperativa Buzos y Pescadores de la Baja California, la Reserva de la Biosfera de Vizcaíno y la asociación civil Comunidad y Biodiversidad, colaboración que ha permitido contribuir en la realización de medidas de conservación importantes para la pardela mexicana.