Ensenada, Baja California, México, 17 de junio de 2016. En presencia de pescadores y autoridades de los tres niveles de gobierno, el pasado 9 de junio se inauguró la Subestación del CICESE en Bahía de los Ángeles.

Acompañada por su equipo de trabajo, la doctora Ma. Elena Solana Arellano, jefa del Departamento de Ecología Marina de este centro y principal impulsora de la subestación, cortó el listón que marcó la apertura oficial de este espacio de investigación a través del cual se pretende, además de aportar conocimiento, generar un vínculo con la comunidad.

“Para investigación por sí sola, Bahía de los Ángeles ya es extraordinaria por ser una reserva de la biósfera. Pero además el pueblo ha tenido mucha comunicación con nosotros; la gente es amable, nos recibe, nos ayuda y nos da soluciones”, expresó la doctora Solana, quien califica a Bahía de los Ángeles como un pueblo mágico debido a su gente y a sus recursos naturales.

La iniciativa de crear una subestación en esta localidad surgió hacia finales del año pasado, al considerar que un buen número de investigadores de este centro que tienen proyectos y salidas de campo en esa región, necesitaban un recinto donde pernoctar, procesar muestras y preparar alimentos.

Además, explicó la Dra. Solana, cada salida de campo tiene un costo elevado. “Puede oscilar entre 30 y 40 mil pesos, por lo que en ocasiones nos resulta muy difícil salir a tomar muestras para los proyectos”. Con la apertura de la subestación, se estarían ahorrando por lo menos entre 150 mil y 190 mil pesos por año, considerando únicamente salidas de un día, una vez al mes, de todos los involucrados.

Junto con Víctor Moreno Rivera, técnico titular de este departamento y coordinador en Ensenada de la subestación, explicó que inicialmente los usuarios que acordaron participar en esta iniciativa son 25 investigadores adscritos a los departamentos de Geofísica Aplicada, Sismología, Oceanografía Biológica, Oceanografía Física, Ecología Marina, Acuicultura, Biología de la Conservación y de Innovación Biomédica, además de todos los de la Unidad La Paz (ULP) del CICESE.

“Por ser una reserva de la biósfera debería de haber una línea base y no la hay, esa es la primera investigación nueva a realizar. Actualmente se está trabajando con pulpos, tortugas marinas, con pepino de mar; los geólogos están buscando agua, se estudia la relación con los sismos, se está trabajando en bentos y con tiburón ballena”, argumentó Ma. Elena Solana.

Esta representación del CICESE se localiza en una propiedad conocida como La Casa de Colores, al norte del poblado. Se trata de un domicilio bastante amplio, localizado a 40 metros de la playa. Cuenta con cinco habitaciones (cuatro de ellas con baño), cocina y espacios amplios, incluso cada habitación se puede dividir para acomodar mejor a los visitantes.

El proyecto consiste además en acondicionar un sencillo laboratorio y equiparlo con lo básico: microscopios, centrifugas y mesas de trabajo, y se buscará contratar a un velador, una persona para limpieza y un técnico de planta que estaría viviendo en aquel poblado.

Cuenta también con una aula de usos que lleva el nombre de “Antonio Reséndiz” en honor al fundador del campo tortuguero, un laboratorio que permitió estudiar detenidamente la biología y fisiología de las tortugas marinas, logrando la recuperación de la especie y posicionando a Bahía de los Ángeles como referente internacional ante la comunidad científica.

Ma. Elena Solana explicó que al término del primer año de operaciones se hará un análisis de factibilidad, y si la subestación trabaja exitosamente, se solicitarán recursos al CONACYT para financiar su operación y equipamiento.

Informó también que se firmó un contrato de colaboración con Ecocimati, A.C., con la cual buscarán desarrollar proyectos de investigación, conservación, ecoturismo y educación ambiental. Además, existen tres convenios: con la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP), para facilitar los trabajos de la subestación, particularmente con las áreas naturales protegidas de la Zona marina de Bahía de los Ángeles, canales de Ballenas y Salsipuedes; con la Comisión del Complejo Lagunar Ojo de Liebre, y con las oficinas centrales de la CONANP en la ciudad de México.

La primera actividad académica programada en la Subestación del CICESE en Bahía de los Ángeles se llevó a cabo el 9 de junio. Se trató del segundo Taller de socialización del proyecto de evaluación de pepino de mar (Isostichopus fuscus), dirigido a pescadores y productores de la región, y organizado por el Dr. Luis Eduardo Calderón Aguilera, responsable del estudio que se ha estado realizando en esta región desde hace tres años con recursos del fondo sectorial SAGARPA-CONACYT.

Este proyecto, que pretende evaluar la población de pepino de mar, responde a una demanda específica del sector pesquero; primero, para definir si puede pescarse o no; segundo, considerar la viabilidad del maricultivo de esta especie en la costa oriental de Baja California.